En llamas, Suzanne Collins

Bloggeros, hoy no os traigo un libro. Hoy os traigo mucho más que eso: os traigo un mundo, una maravilla, la que es, en mi opinión, la culminación de la trilogía Los Juegos del Hambre; su segunda parte, En Llamas, y mi novela favorita de las tres. Y, como os puedo asegurar que me ha apasionado, no va a ser una reseña normal y corriente -lo siento, no podía ser de otra forma-, ya que la mayor parte de las cosas que dije en la reseña de los Juegos del Hambre son aplicables a toda la saga. Voy a esmerarme por decir qué diferencias he encontrado entre la primera parte y la segunda, y por qué me ha gustado más.

(Contiene spoilers de Los Juegos del Hambre)

Katniss no sólo ha ganado los temibles Juegos del Hambre. Además, ha logrado que también Peeta, su compañero del Distrito 12, salga con vida de ellos. Pero el hecho de desafiar al Capitolio, aunque ella no lo hubiera hecho intencionadamente, ha comenzado a desatar la chispa de la revolución en algunos Distritos, que han visto una esperanza en la acción de Katniss.

Sin embargo, ella sólo quería una vida normal tras los Juegos. Pero sabe que éso no será posible cuando el presidente del Capitolio, Snow, se presenta en su casa para hablar con ella.

DIFERENCIAS ENTRE EN LLAMAS Y LOS JUEGOS DEL HAMBRE

(Contiene spoilers de En Llamas)

Veamos, las cosas como son. Los Juegos del Hambre es muchísimo más original que En Llamas: cuenta con el factor novedoso de Los Juegos, y la aparición de éstos en la segunda parte puede parecer un recurso para no perder el punto fuerte de Los Juegos del Hambre y "estirar" un poquito más el éxito de esta primera parte. Pero nada más lejos de la realidad.

A mí personalmente me dio la sensación de que Suzanne Collins lo tenía todo planeado mucho antes del éxito de la primera parte, porque el hecho de que meta esos segundos Juegos provoca el estallido de los Distritos, la desesperación -cada vez mayor- de Katniss, el romance... en resumen, un punto que puede parecer repetitivo pero a mí me ha resultado más que acertado.

Por otra parte, si ya me quejaba del principio de Los Juegos del Hambre por ser un poquito lento, el de En Llamas es el doble; es lento, sí, pero en ningún momento se me ha hecho pesado, tengo que recalcar eso. Lento no implica pesado o cansino, al menos no por mi parte; de hecho, me ha parecido acertado también, y lo he devorado en apenas un día.

El número de personajes aumenta en esta segunda parte con los nuevos jugadores de los Juegos y, por fin, podremos conocerles más en profundidad: Finnick, Johanna Mason, Beetee... Incluso conoceremos mejor a Haymitch, personaje que me apasiona, y cómo ganó sus Juegos -ese detalle me pareció genial-.

Pero, lo que más me ha encantado de este libro, lo que más me ha apasionado y por eso me ha parecido bestial, es que ha logrado tenerme en tensión incluso más que el primero, ponerme nerviosa, dejarme boquiabierta y expectante, pegar grititos y decir tacos, cosa que yo pocas veces había sentido con un libro.

Creo que no tengo mucho más que decir, porque casi todo lo dije en mi reseña de Los Juegos del Hambre: si el primero fue un libro genial, genialísimo, el segundo se lleva la palma. Una segunda parte maravillosa, que destroza el mito de que "las segundas partes nunca fueron buenas". En serio, si aún no lo has leído, ¿qué estás esperando? Sencillamente genial ^^, y como cabe esperar, mi puntuación es:

Y porque no puedo más...

POSDATA: Cada vez me queda menos para terminar Temblor... ^^