Dos velas para el diablo, Laura Gallego

Buenas noches, bloggeros. Hoy os traigo la reseña de un libro, cortesía de la todopoderosa Cely, que me lo prestó para que me lo leyera después de mucha recomendación y, finalmente, lo acabé esta mañana, en una recta final con esos dos últimos capítulos, sesenta páginas sin descanso xD.

Cat es una humana normal y corriente, pero tiene una gran diferencia con el resto de su especie: sabe que los ángeles y los demonios existen, porque su padre era uno de ellos. Su padre viaja por el mundo, la quiere mucho y jamás haría daño a nadie, jamás ha tenido problemas. Hasta que un día le matan.

Armándose de valor, Cat toma la espada angélica de su padre y huye, buscando estar desaparecida para que  nadie pueda meterla en un orfanato. Acude al único amigo que le queda, un cura llamado Juan Pablo (al que ella, cariñosamente, llama Jotapé), al que le cuenta lo ocurrido, y, decidida a vengar la muerte de su padre, se  dirige a hablar con el único ángel al que conoce: Jeiazel. Sin embargo, éste le da la espalda. Si los ángeles no pueden ayudarla, ¿quién lo hará?

Es entonces cuando encuentra a Angelo, un demonio rastrero y el único dispuesto a ayudarla.

La narración que Laura Gallego mantiene en este libro es, sin duda, uno de los puntos fuertes y motivos por los cuales me enganchó así, de buenas a primeras. Siendo rápida en principio, la historia nos la narra la protagonista, Cat, indudablemente mi personaje favorito de todos los que ha engendrado esta escritora. Pero no nos la narra de una manera normal, ni típica, ni simple para ser una adolescente: nos la narra de manera que nos sentimos perfectamente identificados con la protagonista, que sin duda es una chica con carácter, con pensamientos que me han hecho reír bastante en más de una ocasión. De una manera divertida, sarcástica y socarrona, Cat nos va explicando qué siente, qué descubre, qué piensa. Sin embargo, aunque consigues reír bastante, en los momentos verdaderamente duros pierde algo de credibilidad, sobre todo al principio, donde demuestra que la madurez con la que afronta todo lo que le está pasando no es la misma mediante va descubriendo lo que ocurre de verdad y va asimilando lo pequeña que es en un mundo de seres milenarios. Podemos experimentar un cambio progresivo a lo largo de la novela en la protagonista que, sin duda, sólo ha logrado que me encariñe más aún con ella.

Pero, volviendo a la forma, también tiene sus cosas: al igual que va ganando seriedad mediante avanza la historia, también pierde frescura y agilidad. Toda la información asimilada provoca que la narración se convierta en algo mucho más pesado, siendo conveniente leerlo despacio y con concentración para no perder el hilo, cosa que en los primeros capítulos no pasaba. Esto, sin embargo, no debe verse como un defecto, a menos que lo que se buscara leer fuese algo rápido y fácil; Laura Gallego nos introduce en un increíble mundo fantástico, pero tan realista que incluso me veía dudando si sería verdad o no; cuidando hasta el más mínimo detalle, atando hasta el más fino de los cabos que pudieran andar sueltos. Dando explicaciones a todo lo existente, explicaciones fantásticas pero perfectamente creíbles. Pero de este tema profundizaré mejor en el contenido.

Y, como algún defecto le tenía que sacar, he de decir que DETESTO LOS CAPÍTULOS LARGOS, de cincuenta y pico páginas sin descanso. Pero bueno, esto es algo totalmente personal xD. Yo, en particular, lo habría leído muchísimo más rápido si tuviera una extensión de capítulos normal y corriente. Pero, en fin, eso es lo de menos. Vayamos al contenido.

No sé ni por dónde empezar con respecto a esto. Podría comenzar por su impecablemente cuidada historia y ambientación, por su genial protagonista, por la ligerísima pero adorable relación de amor que se sobreentiende a lo largo de todo el libro. Sin embargo, me voy a olvidar de momento de todo eso y voy a empezar por lo que siempre es el comienzo: las primeras impresiones y lo que me esperaba de este libro.

Muchas veces fueron las que leí su sinopsis, y quizás demasiadas pocas reseñas, y por eso posiblemente imaginaba algo totalmente diferente a lo que he podido encontrarme, para mi grata sorpresa.

Me esperaba una protagonista simple y sosa, quizás una heroína; una historia normalita, más adolescencia y un amor desenfrenado. Ni siquiera yo sé por qué tenía esa impresión de que me encontraría con una novela de tintes crepusculeros, y ahora que ya lo he terminado me parece incluso una ridiculez. En cambio, he encontrado una maravillosa historia, cuidada hasta el más mínimo detalle, con una protagonista arrolladora y un realismo fascinante para tratarse de fantasía. Y, sobre todo, y como dijo alguien (no recuerdo ahora su nick) en este mismo blog, "una manera diferente de ver muchas cosas". Es más, voy a poneros un ejemplo: ¿sabéis que, cuando tenéis un escalofrío, es porque un fantasma os está rozando? Curioso, ¿verdad? ¿A que no lo habíais pensado? Son explicaciones fascinantes a hechos sencillos en la vida cotidiana, y quizá no tanto, que han ayudado a Laura Gallego a tejer esta maravillosa historia en la que nos sumergimos de principio a fin.

Por otro lado, como ya os he dicho, esperaba a una protagonista un poco más sosa, del tinte de Victoria en Memorias de Idhún o de Dana en Crónicas de la Torre. Y, a cambio, he podido conocer a un personaje apasionante: independiente, divertido (¡por fin!), carismático, torpe, sarcástico a más no poder, con sentimientos puros y duros, impulsividad y una personalidad arrolladora. Y es que Cat sabe sacarse las castañas del fuego a cada instante: no en vano ha vivido sola desde que murió su padre, huyendo, buscándose la vida. A lo largo de la novela nos brinda todos sus pensamientos, que más de una vez nos harán reír, y más de una vez nos harán estremecernos. Y Angelo, al que no he nombrado todavía. No tan sublime como Cat, quizá porque no conocemos lo que piensa y siente a cada instante, y sin embargo encantador, sobre todo mediante se va acercando el maravilloso final de la novela, en el que podemos presenciar uno de sus giros vertiginosos.

Porque, en efecto, se dan dos sorprendentes vueltas de hoja en la novela, para nada esperadas que a mí, por lo menos, me han conseguido dejar boquiabierta, uno un poco antes de la mitad (en el capítulo siete) y otro hacia el final, quizá el desencadenante de éste.

Por supuesto, todo tiene sus defectos. A mí personalmente, entre un giro y otro la novela se me hizo quizás un poco lenta por seguir en todo momento el mismo esquema: los protagonistas hablan con unos, consiguen cierta información que les lleva a otros, y así continuamente. No sé, yo esperaba mayor originalidad en ese sentido. Pero, cuando el siguiente giro se da, todo empieza a cambiar y a volverse interesante por momentos; tanto, que no podía parar de leer, a pesar de que a partir de ese momento toda la historia se vuelve más densa, con más información; en torno a 150 páginas repletas de cosas sorprendentes.
En cuanto a escenas... he de decir que tres han sido las que se me han quedado en el corazón.


(A partir de aquí hay spoilers)
-La aparición del fantasma que buscaba a Marie. Sin duda, estremecedor.
-Cuando Gabriel pierde a su hijo a manos de un amigo suyo. Pude sentir la amargura de Gabriel y, sobre todo, pude notar el sufrimiento de los ángeles al provocar la muerte.
-Y, por encima de las dos, la mejor escena en mi opinión de todo el libro, la más especial, la más maravillosa: la aparición de Metatrón. Y de esta no digo nada más, porque no tengo palabras.
(Fin de los spoilers)

Pero no es solo acción y guerras ángeles-demonios y conspiraciones mundiales lo que podemos encontrar en esta novela. También hay una historia de amor. Una historia de amor fina, ligera, delicada, quizás casi imperceptible, que se hace muchísimo más notable en torno al final del libro. Una historia de amor que a mí, personalmente, me ha encantado, porque no es para nada típica, ni normal.
Por otro lado, está la crítica. Profunda, que te hace pensar: la destrucción del mundo. ¿Qué estamos haciendo con él? Lo estamos destrozando, al mundo que nos ha dado la vida. No lo cuidamos. Este libro pretende que comprendamos lo que estamos haciendo: algo horrible.
Eso sí: la novela, con tanto nombre de ángel y demonio por ahí pululando, a veces resulta demasiado liosa. En más de una ocasión perdí el hilo de la historia y tuve que releer algunas páginas.
En cuanto a la edición, es preciosa. Tapa blanda con solapas en forma de alas de ángel y demonio, cada una en una solapa. El comienzo de cada capítulo está decorado con una imagen de un ángel y un demonio en negativo, y el número de la página está rodeado también de dos alas. Esos pequeños detalles me gustan mucho, que yo soy muy así para las ediciones xD.

Y bueno, no voy a explayarme más. Un libro que me ha encantado, de lo mejorcito que he leído últimamente; no apto para un día de relax, ya que esta novela es absolutamente trepidante. Quizá poco original en cuanto al esquema, pero mucho con respecto a la historia. Con un final apasionante, genial, maravilloso. Trescientas setenta y ocho páginas de pura adrenalina.

Posdata: Canciones para Paula es muchísimo más adictiva de lo que yo esperaba. En un día llevo ni más ni menos que 250 páginas devoradas. Me da la sensación de que tendréis reseña muy pronto xD. Y, por cierto, ¡en Reyes me regalan una cámara! Os grabaré IMM Vlogs y seré feliz *-* Y, por supuesto, GRACIAS a esos 80 seguidores :) Me hacéis muy feliz, de verdad ^^ Un beso muy grande a todos.